Hace unos días comiendo con mi madre y mi hermana en El Secreto a Voces (Ruta de los Vinos, Oviedo), un lugar en el que puedes comer el mejor menú del día y el más diferente de toda la ciudad, probé una panna cotta que estaba perfecta de sabor y de textura. Desde ese día me quedé con la gana de hacer la prueba en casa de este postre italiano, así que aprovechando que tenía la despensa llena de chocolate belga traído directamente desde Bruselas por el director creativo, ideé esta panacota de chocolate blanco con caramelo de naranja que está de chuparse los dedos.
Es un postre muy fácil de hacer y que además podéis tener preparado en la nevera para una ocasión especial. Además es muy económico. El caramelo lo podéis hacer con el sabor que queráis añadiendo simplemente un chorro del zumo de vuestra fruta preferida.